Descolgarse de la autovia un día de agosto en plena calima y perderse en su laberinto de plásticos no será un placer pero si que te servirá para ver una de las ciudades, desde el punto de vista sociológico, mas interesantes. El titulo de esta entrada corresponde a un documental realizado en el 2008 por Jawad Rhalib, rodado durante tres años en El Ejido, lastima que por un año más no le puso la guinda. En el 2009 a su alcalde Juan Enciso "el chato" reelegido durante casi 20 años le cayo todo el peso de la ley, por corrupto, lo llegaron a expulsar del PP y creo el PAL y salio reelegido en El Ejido. Tambien le toco la loteria, como a otros benefactores prohombres.
Esta ley del beneficio ha convertido todo el suelo útil en plástico, sin pensar en nada mas, no han sido capaces ni de planificar un paraje natural junto a unas lagunas.
En el 2000 tuvo un episodio de violencia que destapo un sentimiento xenófobo difícil de erradicar.
Durante años se estuvieron quemando los plásticos sobrantes generando dioxinas y se les denuncio en muchas ocasiones por el mal uso de pesticidas.
También durante mucho tiempo tubo el record de renta percápita mas alto, de burdeles, de oficinas bancarias, de mercedes matriculados, pero también de suicidios.
Hoy fuera de regulación quedan unos 2000 subsaharianos que malviven en chabolas, que tienen en la rotonda su oficina de empleo y que son contratados por 30 euros, ellas pueden prostituirse por unos 10 euros.
Los propietarios se justifican diciendo que llevan tres años con perdidas y que son las distribuidoras las que marcan los precios. Los depredadores sin darse cuenta también se han convertido en proteínas.
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